Londres, Inglaterra
Londres, capital política y económica del Reino Unido, es una de las ciudades más visitadas del mundo debido a su carácter especial y cosmopolita. Imposible de describir a través de un texto, para conocer Londres es necesario visitarla y vivirla, dejando que el toque especial de la ciudad y sus gentes nos seduzcan a través de su acogedora inmensidad.
¿Qué hacer en Londres?
Podríamos estar visitando Londres durante semanas y no acabar de ver todo lo que la ciudad ofrece. Te presentamos algunas de las visitas y actividades imprescindibles en Londres.
Palacio de Westminster
El Palacio de Westminster (Palace of Westminster), también conocido como las Casas del Parlamento (Houses of Parliament), es un edificio gótico victoriano que alberga las dos Cámaras que componen el Parlamento Británico.

Piccadilly Circus
La plaza es conocida por sus carteles luminosos y la fuente de Erossituada en el centro, que se ha convertido en uno de los iconos de Londres. La oferta de ocio de Piccadilly Circus es muy extensa, desde una gran cantidad de tiendas, cines y teatros, hasta restaurantes para todos los gustos.

Torre de Londres
Construida bajo el reinado de Guillermo I, la Torre de Londres es una enorme fortificación que ha funcionado a lo largo de su historia como residencia real, arsenal, fortaleza y prisión.

Tower Bridge
Tower Bridge es uno de los símbolos de Londres. Este llamativo puente levadizo, construido con estilo victoriano, se encuentra situado junto a la Torre de Londres.

Trafalgar Square
es una de las plazas más importantes de Londres. Fue creada en 1830 para conmemorar la victoria de la armada británica frente a la española y la francesa en la Batalla de Trafalgar.

Covent Garden
Es una de las zonas más fascinantes de Londres. En esta zona los artistas callejeros se afanan por mantener un ambiente alegre mientras los visitantes recorren las tiendas, o disfrutan de un café.

No te quedes con las ganas de conocer esta hermosa ciudad que parece salida de un cuento, comunícate con nosotros, Yukatravel no tiene fronteras.